jueves, abril 02, 2009

De WATCHMEN y el origen del CAPITÁN NADIE

O podría decir: de WATCHMEN y sus influencias sobre CAPITÁN NADIE.



Cuando se publicó el primer libro del Capitán Nadie, cada vez que surgía la consabida pregunta: “¿En qué se inspiró…?” yo sacaba a relucir (entre otras cosas) WATCHMEN. Salvo rara excepción, nadie sabía de qué puñetas estaba hablando. Y no crean, en ciertos círculos sigue siendo igual, pero en general la cosa ha cambiado.
Desde hace ya un buen puñadete de años, y hasta hace poco, muchos lectores de comics discutíamos la importancia y valor de WATCHMEN como comic. Tras el estreno de la adaptación cinematográfica, el debate (lógicamente) se ha ampliado.
Se puede hablar y escribir mucho de WATCHMEN; se está haciendo, pero creo que a veces se pierde buena parte de los mensajes más básicos y universales que transmiten sus personajes y la historia que los envuelve.
No es que éste post vaya a corregir esto, pero algunos amigos me han pedido que “postée” la esencia de nuestras conversaciones sobre esa decisiva influencia que WATCHMEN tuvo en la concepción del personaje del Capitán Nadie. Qué diablos. A ello.

Leí WATCHMEN casi de un tirón, ya que compré de golpe los doce números de grapa de la serie en la tristemente desaparecida Elektra de Sevilla. Curiosamente, lo que motivó mi interés fue un artículo en un comic fórum, competencia directa de zinco, que publicó WATCHMEN en España. Podríamos hablar tanto de esto… pero no es lo que quiero comentar.
Recuerdo el título del artículo: WATCHMEN, CLARO QUE SÍ.
Aquel comic impresionó tanto al firmante (no recuerdo quien fue) que rompió el protocolo para alabar la obra.

Bueno, leí WATCHMEN, y fue una gran satisfacción. Ví recientemente la película, y aunque hubiese preferido que el final fuese el del comic, me gustó muchísimo. El fim aporta su propia visión, y aporta una fuerza que me hace desear tener pronto se versión en DVD, Blue ray o lo que sea, para disfrutarla al detalle. ¿Un final alternativo como el del comic? ¡Ojalá!



Y a lo que iba: ¿Por qué y cómo influyó WATCHMEN en mí, y en la creación del Capitán Nadie?


Dr. Manhattan





Todos los héroes de WATCMEN se sustentan en su mantenimiento y/o equipación, salvo naturalmente el Dr. Manhattan. Probablemente, Moore creo tal contraste extremo para reforzar la definición de los personajes.

Me gustó mucho el tratamiento del Dr. Manhattan. Siempre me pareció que un ser con poderes de tal magnitud tendería a perder la perspectiva humana, o le sería muy difícil mantenerla al poder influir de forma tan decisiva en la historia del ser humano. Manhattan se va convirtiendo en un observador fascinado por la complejidad del universo.


Tal vez a causa del Dr. Manhattan, el Capitán Nadie está al final de la cola en cuanto a magnitud de poderes.


El Comediante




Bajo el cinismo y la amoralidad del Comediante hay una sensibilidad enterrada por el miedo a una sospecha: "Todo es una broma pesada."

El comediante representa en mi opinión el relativismo de la maldad. El ser humano, en su complejidad, se escapa a veces de su marco ético. El mal puede ejercer a veces el bien, y viceversa. Una verdad terriblemente difícil de aceptar para aquellos a los que nos gusta la imagen romántica del héroe.

Para escapar de tan trágico paradigma, al Capitán Nadie le guía un destino, una fuerza oculta se intuye en su historia.


Rorschach





¿Y cómo soportar el horror del crimen sin cruzar la línea? ¿Cómo evitar convertirse en brazo ejecutor, cuando sabemos que el mal ejercido por el hombre se escurre a menudo entre los torpes dedos de la ley?

Sumado a que la infancia puede ser injustamente sórdida para algunos, mientras feliz para otros, Rorschach es una de las caras de la fragilidad humana frente a su gran potencial.

Me encanta Rorschach, porque agita nuestro sentido de la moral, nos hace cuestionarlo, y buscar el modo de mejorarlo o al menos no basarlo en cerrados juicios de valor.

El Capitán Nadie (Paquito) no bucea en el mundo de los crímenes sórdidos por voluntad del autor, y no pienso pedir disculpas por ello. Si queréis sordidez, poned la televisión.


Búho Nocturno II




Probablemente mi personaje preferido. Una suerte de Batman que quiso ser superhéroe no por trágicos motivos personales, sino por vocación. En buena lógica, le ayuda el ser un afortunado heredero, al tiempo que un tipo inteligente, instruido, organizado y perseverante. El Búho Nocturno representa a un héroe humano que mantiene su voluntad de estar tan dentro de los márgenes de la ley como sea posible.


El Capitán Nadie está bastante en su línea, pero quitadle la herencia, formación e intención deliberada de ser un héroe ^_^

Espectro de Seda II ( Silk Specter. Cómo pierden algunos nombres al ser traducidos)





Como el Búho, Espectro representa en gran medida la fuerza del pasado porque ambos tienen antecesores. Pero en el caso de Silk Specter, ha sido la inercia y la influencia de su madre lo que le ha llevado a ser una heroína. A veces las personas se dejan guiar o empujar hacia su destino sin más, y son lo que son no por sí mismos, sino porque siguen la corriente. Introduce un personaje femenino audaz, al tiempo que un ingrediente romántico complejo. Tal vez en WATCHMEN subyazca cierto machismo por parte de Moore, pero no seré yo quien apoye ni plantée la idea, aunque si constato que los personajes femeninos tienen menos relevancia. ¿Reflejo de la realidad?


Ozimandias





Nada como una posición de poder y la obsesión de trascender como benefactor, para convertirse en un maquiavélico digno del calificativo.

Veidt pierde la fe en el hombre de a pie y decide "salvarlo" sacrificando a unos miles... o millones. Una vez más la pérdida de la perspectiva humana, y el reflejo de las decisiones de algunos gobernantes.

La sospecha de que el 11 S es como en WATCHMEN un engaño destinado a señalar a un enemigo común, como medio para ganar fuerzas, tiene ya viejos antecesores como los bombardeos del gobierno en el 1984 de Orwell.

El malvado de la historia es al final un gran empresario sentado tras un caro despacho, viviendo al margen de la realidad cotidiana de los que hacen realmente al mundo del hombre como es, y creyéndose con derecho a moldearlo.


Hay algo de Veidt en los malos de Capitán Nadie. Tal vez el imperio urbano tenga algo del de Adrian Veidt.


Los Minutemen




El encanto del pasado en sepia. La nostalgia de una época más pura, que tal vez siempre sea en realidad el falso espejismo de nuestra propia inocencia perdida. ¿Todos añoramos un entrañable pasado que fue para otros un deleznable presente, con otro dorado pasado a su vez?

La representación del hipotético pasado del universo de WATCHMEN en el film, es en mi opinión uno de los mayores logros de la adaptación cinematográfica, que para mí, supera en esto al comic, con todos mis respetos.

Paquito confecciona el disfraz del Capitán Nadie a partir del casco y gafas de motorista de los años sesenta que pertenecieron a su padre.

La tragedia de la película podría ser que no está recaudando lo suficiente para ayudar a que fructifiquen futuros proyectos de éste tipo. ¿Demasiado para el público? o la constatación de que los bien o mal llamados frikis no representamos un público objetivo suficientemente numeroso?

En mi opinión, es la mismísima alegoría de la historia dentro y fuera de WATCHMEN, y es que muchos prefieren conformarse con arañar la superficie, no sea que debajo, el monstruo seamos nosotros mismos.

11 comentarios:

sempiterna dijo...

Waw! Pedazo de post, Capi. En fin, habíamos asistido a tus opiniones e influencias, al menos yo, varias veces, pero como este análisis en paralelo tan clarificador, nada. Y eso que no conozco demasiado Watchmen.

En fin, me alegro de que aunque tardes en regalarnos post, sean tan completitos como éste.

Besazo.

Capitán Nadie dijo...

Sin tu recomendación, no habría tal post.
Gracias Sempi.

Francis dijo...

Un post sencillamente genial Pepe, que cómo no, merece un comentario.
¿Qué decir de Watchmen? Pues que es una obra inquietante sin duda. Nos muestra una realidad sin esperanza alguna, condenada a la destrucción, al Armagedón, al que al parecer, todos se entregan con la más absoluta resignación.
En la obra, sutilmente, pero a la vez de forma sistemática, se va destruyendo toda esperanza. Por ejemplo, cuando un ser extraordinario como el Dr. Manhattan declara que Dios no existe, siendo él mismo una expresión de la Divinidad. Ante sus ojos y entendimiento, se muestra la arquitectura atómica de las cosas ¿y no es el baile eterno de electrones alrededor de neutrones en armonía perfecta una muestra de una inteligencia superior? Nuestras propias células poseen esa inteligencia, y se comportan en afinidad a ésta. La física cuántica dice que el 99% de nuestro cuerpo es espacio vacío, y que en el vacío, se encuentra un campo de energía inteligente. El Dr. Manhattan es capaz de crear moldeando la materia a su voluntad, otra capacidad propia de la Divinidad, y me pregunto, si un ser como él, no se sentiría responsable de sus “hermanos pequeños”, en lugar de tratar de apartarse y actuar de forma indolente.
Otra cosa que se deja entrever es la manipulación a la cuál la sociedad se ve sometida, que la hace comportarse exactamente como se espera que lo haga. A Veidt solo le basta observar los canales de televisión para prever lo que ocurrirá ¿Nos está diciendo aquí Moore que los Medios están encaminados a dirigir subliminalmente nuestros pasos?. Escalofriante idea.
¿Es el genocidio la única solución que puede encontrar el hombre más inteligente del mundo para hacer entrar a la Humanidad un tanto en razón? ¿O es que acaso la genialidad extrema raya a la locura? ¿Quién sería el ídolo del hombre más inteligente del mundo: Alejandro Magno o Mahatma Gandhi? El personaje de Ozimandias me defrauda. A un tipo así yo lo veo en cumbres internacionales, como mediador de conflictos, como presidente de una comisión ética internacional, como asesor de economía global; y no como un excéntrico millonario apartado de todo y refugiado en su emporio económico.
Afortunadamente hay tipos al corriente del “juego”, esos son los auténticos superhéroes. ¿Se dejarán arrastrar también por el drama y la tragedia? ¿Tendremos también que pintar en las calles “Who watchs the watchmen”?

Capitán Nadie dijo...

Muy bueno, Francis... ¡E Inquietante! Un vistazo a la sociedad actual, con una crisis en ciernes que a veces muestra destellos de estar planeada, (o al menos aprovechada para hacernos bajar la cabeza y aceptarlo todo)hace temer que obras como 1984, Mundo Feliz o Watchmen, sean lienzos proféticos. Yo me niego a perder la fe en los sinceros, los que aman, los héroes... Y mantengo la fe en los Homo Imaginautas ^_^ ¿Qué me queda si no?

Marcosuiz dijo...

Hace unos 20 años el hermano de un amigo nos comento(a Fernando cadenas y a mi)que queria crear un superheroe...Me llena de felicidad tener noticia del Capitan Nadie y que sus aventuras hayan tenido continuidad.Veo,con agrado,que los sueños pueden hacerse realidad.felicidades.
P.D:todos los superheroes tenemos identidad secreta.Si la descubres(basta con preguntar a Fernando o a Dani)espero que seas discreto y no la divulgues.

Capitán Nadie dijo...

Gracias Marcosuiz. La anécdota me pone sobre la pista, pero no seré yo quien te desenmascare ^_^
Y por cierto: Alucinante tu blog. Para echarle horas!!
Nos vemos.

Manuel García dijo...

Como en tantas otras cosas en esto de los comics soy un profano. Pero en el Capitán Nadie se puede ver que eres un versado en este tema. Los héroes son simples iconos, Los Watchmens obedecen a estereotipos para que los lectores se sientan identificados. Algo así como las Spice Girls. El Capitán Nadie supongo que estará formado por decenas de personajes de los tebeos (como cualquier otro personaje). Sin embargo, este héroe se debe un poco más a la humildad y a la sencillez. No como éstos que son pura fibra y algo de arrogantes.
Un saludo.

Capitán Nadie dijo...

Sin duda tienes razón, Manuel. Eso no quita que los estereotipos de algunos personajes como los WATCHMEN cubran otros campos. Por ejemplo, el del posicionamiento moral y legal ante la sociedad y sus problemas.
El Capitán Nadie sin duda, bebe de muuuchas fuentes ^_^

Antonio dijo...

Hola, soy profesor del IES Puente Ajuda de Olivenza, Badajoz, donde esperamos impacientes contar con tu presencia el 28 de abril. En primer lugar, te felicito por tu personaje (que ha encantado a los alumnos), y también me gustaria que me contactases para que comentásemos un poco la jornada. Un saludo.
Antonio Parra
aparrod@gmail.com

Capitán Nadie dijo...

Me muero de ganas por ir a Extremadura, Antonio. Te escribo al e-mail.

Antonio dijo...

Gracias por tanta diligencia en tu respuesta. Estamos en contacto.